La desatención al cliente

“El cliente tiene el poder para despedirnos a todos, desde el empleado más bajo hasta el Presidente de la compañía. Basta con que decidan irse a hacer sus negocios con otra empresa… ¡y tendremos que irnos todos!» Sam Walton, fundador de la cadena minorista Wal-Mart.

Hemos hablado a lo largo de estos meses de la importancia vital que tiene el cliente para cualquier empresa, incidiendo en que es lo único realmente imprescindible. Pues es curioso ver la dejadez que presentan algunas compañías hacia su bién más preciado.

Me estoy refiriendo a algunas empresas de telecomunicaciones y sus departamentos de desatención al cliente. En concreto de mi última experiencia con telefónica; con la que llevamos luchando varios meses, sin éxito, para que modifiquen el nombre de la empresa que está equivocado tanto en las facturas como en la guía telefónica.

Algo tan sencillo como sustutuir ctresc por Cetresce en una base de datos (No me refiero a cambiar el titular), parece ser tremendamente complejo en una empresa líder en tecnología.

Lo curioso es que en las últimas llamadas el procedimiento para solucionar el problema evoluciona. Al principio se modificaba en el acto, luego era preciso esperar unos 5 minutos y la última es que es necesario enviar un fax solicitando el cambio. En definitiva que en las facturas sigue apareciendo mal y a este paso en la guía telefónica volvera a salir equivocado.

Otro aspecto que me irrita es el hecho de que incluyan en la factura servicios que el cliente no ha contratado, a ver si cuela. Estos servicos al principio son gratuitos y pasados unos meses comienzan a facturarlos.