El cliente interno

Podríamos partir de la siguiente premisa: El trabajador contento y motivado rinde más.

El Marketing Interno se sustenta en la base de que el trabajador es el primer cliente de la empresa y por lo tanto debemos fidelizarlo. Se encarga de promocionar la esencia de la marca e imagen de la compañía entre sus trabajadores. Busca que los trabajadores se identifiquen con la filosofía y los valores de la empresa aumentando su motivación y fidelidad hacia la misma.

Los pilares básicos sobre los que se sustenta el marketing interno son:

– Una cultura empresarial compartida por todos los miembros de la organización (creencias, valores, hábitos, actitudes y conductas.)
– Planes de formación continúa adaptados a los empleados
– Fomento del espíritu de grupo y del intercambio horizontal de información.
– Sistemas adecuados de remuneración, de incentivos y de promoción profesional.
– Una comunicación interna adecuada tanto en sentido horizontal como vertical.

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